Sergio Pérez, hijo del afamado y reconocido luthier madrileño Teodoro Pérez, construye sus propias guitarras manteniendo las señas de identidad que siempre han caracterizado el trabajo de su padre. Maderas escogidas, mimo en los detalles y el saber hacer que da la dilatada experiencia de su padre, resultan en un trabajo de gran calidad y además de contenido precio.